Un individuo originario de la ciudad de Orenburgo, Rusia, ha sido acusado de robar las cuentas bancarias de múltiples ciudadanos. Un miembro del Departamento de Investigación local se ha encargado de poner cargos en contra del usuario, según lo previsto en los artículos 158 y 174 del Código Penal de la Federación Rusa.
Al parecer el acusado era empleado de una compañía de telecomunicaciones, quien abusando de su posición copió los códigos de identificación de las tarjetas SIM de algunos de los clientes de la compañía. Fuera de su horario laboral, y empleando sus conocimientos en telecomunicaciones, el acusado comenzó a enviar mensajes a los números de atención al cliente de un banco haciéndose pasar por los clientes. Finalmente, el acusado logró interceptar las claves de autenticación de los usuarios afectados.
Después de repetidos intentos de vincular una tarjeta bancaria a un teléfono, el empleado transfirió fondos de los afectados a diversas cuentas bajo su control y luego las convirtió en criptomonedas, tratando de cubrir sus rastros.
En total, 124 personas fueron afectadas por el empleado, que logró robar alrededor de 1 millón de rublos. A pesar de los sofisticados métodos empleados por el individuo, las autoridades finalmente detectaron su ubicación y lo arrestaron; las leyes vigentes en Rusia establecen penas de hasta 20 años de prisión en casos como este, aunque el acusado sigue a la espera de conocer su sentencia.
Trabajando como arquitecto de ciberseguridad, el se enfoca en protección de datos y la seguridad de datos empresariales. Antes de unirse a nosotros, ocupó varios puestos de investigador de ciberseguridad con diferentes empresas. También tiene experiencia en diferentes industrias como finanzas, salud medica y reconocimiento facial.